Seguimos hablando con nuestros profesores de Ongravity y en esta ocasión nos toca conocer algo más a Raúl, profesor de acrogim. Un auténtico apasionado de lo que hace que lo demuestra cada día. No hay acrobacia que se resista ni salto con el que no deje con la boca abierta.
Raúl es uno de los más veteranos de Ongravity y uno de los favoritos de los más pequeños ya que sus clases son siempre divertidas y emocionantes. ¿Quieres saber más de él? Pues aquí tienes algunos detalles de su vida que seguro te van a sorprender.
¿Cómo comenzaste en el mundo de las acrobacias?
Empecé muy joven, a los 7 o 8 años en cama elástica, que es mi especialidad. Al poco tiempo entré en la selección española y empecé a competir. Me gustaba muchísimo, pero el tiempo pasa.
¿Cómo llegaste a ser profesor de Ongravity?
Con 14 años, mi entrenador ya me dejaba trabajar con los más pequeños. Me encantaba ayudarles y entrenar con ellos y por eso ya empecé a pensar en la posibilidad de formarme como entrenador para un futuro.
También es cierto que, económicamente, es muy complicado mantenerse en el mundo de la gimnasia y cuándo cumples años te ves obligado a buscar otras salidas.
Al principio combinaba la competición con espectáculos, fui acróbata profesional. Me hacía temporadas de circo de dos o tres meses para poder seguir compitiendo hasta que llegó un momento que vi que la carrera como deportista se iba a acabar y quería hacer algo. Decidí irme a Nueva York y seguir formándome allí como profesor.
¿Qué es lo que te gusta de ser profe y que no?
Me gusta mucho dar clases y transmitir lo que sé a los niños. Y lo que menos me gusta…. Lo más difícil es organizar a los niños, aunque hay que reconocer que los niños trasto también te ponen a prueba como profesor. Motivarles a seguir la clase es también una motivación para mí.
El impacto de las Redes Sociales
¿En quién te fijas para seguir avanzando? ¿Quiénes han sido tus ídolos?
Yo tuve la suerte que mi ídolo era un compañero de mi gimnasio, José Manuel Muñoz. Que es uno de los mejores gimnastas de España. Desgraciadamente nunca ha llegado ningún español a las olimpiadas en la modalidad de camas elásticas, pero eso no quiere decir que no los haya muy buenos. Es cierto que en los Juegos Olímpicos ves gente estratosférica como los japoneses o estadounidenses, que parecen de otro planeta.
Las Redes Sociales han ayudado mucho a dar a conocer este y otros deportes minoritarios. ¿Cómo te afecta como profesor?
Sí, hay un boom grandísimo gracias a las redes y ahora estos deportes son más conocidos. La parte negativa es que los niños ven un vídeo en YouTube y quieren hacer lo mismo en un día. No se ve la preparación física grandísima que hay detrás y en ocasiones es contraproducente. Pero es cierto que ha ayudado un montón a dar visibilidad a este deporte y a animar a niños para que se inicien en las camas elásticas.
Una vez que te bajas de la colchoneta, ¿cuáles son tus hobbies?
Soy un deportista bastante completo. Dentro de lo que es la gimnasia me gusta probar un poco de todo. También soy profesor de BMX. Me gusta el skate, motocros… todos los deportes de riesgo van conmigo. Siempre he sido el niño raro. No me gusta el fútbol ni los deportes a lo que jugaban los niños en el parque. Mi ocio es el deporte y si es de riesgo mejor.