Parkour

El parkour, deporte urbano apasionante donde los haya, tiene la característica de que se compite contra uno mismo. Además, mostrar respeto por el resto de participantes es la máxima expresión de este deporte. Por ello, no debemos causar ningún tipo de molestia a los compañeros ni a los peatones que transitan por las vías urbanas.

Como en cualquier disciplina deportiva, en el parkour hay una serie de claves básicas para perfeccionar poco a poco la técnica aprendida en los inicios por cada persona. Siempre es necesario informarte de qué tipo de técnicas puedes utilizar para mejorar tus saltos y acrobacias. Hoy repasamos los aspectos esenciales que te ayudarán a mejorar en la disciplina del parkour, centrándonos fundamentalmente en los saltos y los aterrizajes.

Saltos: escalones y barandillas

No hay mejor forma de practicar los saltos de parkour que tener a mano los escalones de un edificio, emplazamiento ideal para iniciarse en sus diferentes niveles. Tal vez parezca fácil subir uno o dos escalones de un simple salto, pero antes de progresar más con un mayor número de escalones, hay que ser capaz de realizar diez repeticiones aterrizando con los dedos de los pies. Si podemos saltar tres o cuatro escalones sería un gran avance, mientras que a partir de cinco estaríamos hablando de una gran capacidad de salto.

Si queremos practicar saltos de obstáculos es idóneo conseguir una barandilla de una altura media y que pueda agarrarse sin mucha dificultad. En dicha barandilla se podrán ir perfeccionando algunos movimientos del parkour que no supongan una enorme dificultad para el traceur.

Parkour

Perfeccionar los aterrizajes

Se puede practicar desde diferentes alturas y no es recomendable forzar demasiado para hacer un aterrizaje simple o uno de rotación. Por ello, cuando nos iniciamos en el parkour lo más indicado es hacerlo a nivel de suelo hasta tener controlada la técnica, y a partir de ahí se podrá aumentar la altura y el salto.

Lo más indicado para realizar un aterrizaje correcto y seguro es abrir las piernas a la altura aproximada de los hombros, cayendo con la punta de los pies para reducir el impacto, además de evitar doblar las rodillas más de 90º. Si le sumamos dificultad usaremos las manos para frenar el cuerpo al estar echado hacia delante.

El movimiento de rotación puede evitar al traceur sufrir muchas caídas y se fundamenta en una voltereta en diagonal usando un brazo que haga de amortiguador en el aterrizaje previamente a utilizar el omoplato. Sería un error entrar directamente con el hombro porque conllevaría un gran riesgo de romperse la clavícula.

Practicar sobre muros

Si queremos practicar en este tipo de superficie es clave mantener un cierto equilibrio. Lo más importante es estabilizarse sobre una pierna y a continuación sobre la otra. A posteriori, es aconsejable realizar este tipo de prácticas sobre superficies más complejas e irregulares y también con ambas piernas. Por último, hay que entrenar en la calle y caminar por encima de alguna muralla, aunque de forma progresiva comenzando por las de menos altura para coger más destreza y confianza en el entrenamiento.

En Ongravity Freestyle Indoor Center contamos con un circuito de parkour en Madrid totalmente equipado por diferentes clases de módulos, vallas, muros, cajones y barras con alturas encadenadas, que llegan hasta los 6 metros.

Dentro del circuito podrás correr, saltar y rodar sin límites de imaginación, contando con una superficie de 150 metros cuadrados. Está claramente diseñado para que practiques tu deporte favorito y puedas convertirte con el tiempo en un traceur de máximo nivel. Además, Ongravity es el lugar ideal para practicar free running en un marco deportivo lleno de opciones para todos los gustos.

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